Decora la mejor parte de tu hogar: El jardín

Cada vez existen más personas interesadas en saber cómo cuidar, mantener y decorar un jardín para tenerlo en perfecto estado. Pero conseguirlo no es tarea fácil. Y esto se complica más si cabe, cuando contamos con un espacio pequeño.

Un buen jardín debe estar bien diseñado, debe contar las especies vegetales adecuadas y con elementos que cumplan con el objetivo y la finalidad de esa zona verde.

Antes de pasar a la acción

Como bien pudimos mencionar anteriormente, un jardín pequeño debe estar planificado de antemano. En caso de que lo decoremos sin pensar, el resultado puede que sea el no esperado. Por lo tanto antes  de empezar pregúntate:

¿Cuál es la situación actual?

En este caso nos referimos al estado actual del espacio, es decir, qué se puede aprovechar o  el estado actual del jardín, es decir, qué se puede aprovechar o qué está en mal uso. Hay veces en que es mejor empezar desde cero para lograr el espacio perfecto.

¿Cuál es la finalidad de mi jardín?

Dependiendo del objetivo que busques, el diseño o la vegetación que plantes debe ser uno u otro. Puedes diseñar un jardín para relajarte, para decorar con plantas o para por ejemplo disfrutar con tu familia. Tu elección determinará prácticamente todo lo demás.

¿Qué diseño?

Aquí son tus gustos los que deciden. Puedes optar por un diseño minimalista que invite a la paz y a la relajación o por un diseño centrado en destacar la vegetación.

¿Cómo se debe distribuir los elementos de mi jardín?

Esta decisión vendrá determinada por lo anterior. Dependiendo de la finalidad que le hayas buscado a tu zona y del diseño que hayas decidido, debes plantearte la distribución de los elementos. Ten en cuenta el espacio del que dispones, pues una mala distribución en un jardín pequeño puede tener consecuencias horribles.

Una vez que has decidido todo lo anterior, es el momento de ponerte manos a la obra.

Plantearse instalar fuentes y mobiliario

Una buena opción para lograr un jardín en el que poder relajarse, es el uso de fuentes. Como quizás ya sepas, el agua significa continuidad y purificación, por lo que un espacio en el que se instale uno de estos elementos será sinónimo de paz y serenidad.

Si buscas pasar tiempo en tu jardín, poder disfrutar del aire libre y hacerlo con amigos o familia, los muebles son una buena forma de conseguir una magnífica experiencia. Adapta el mobiliario al tamaño del espacio y asegúrate de que sean cómodos y, sobre todo, que resistan a las inclemencias del tiempo.

Escoger la vegetación 

Las plantas, en muchos diseños exteriores, son las piezas centrales de un espacio verde. Por ello, no se deben plantar a la ligera, el cultivo debe hacerse con criterio.

A la hora de llevar a cabo la siembra de vegetación, debes tener en cuenta las características del jardín. Debes tener claro la sombra que se proyecta (la luz solar que recibe), el tipo de sustrato o por ejemplo la humedad y el clima.

Una vez analizado esto, es el momento de elegir las plantas.

Una buena variedad de especies va a garantizar la riqueza visual y estética de tu jardín. Si no sabes qué plantar, aquí te van algunos ejemplos:

Cactus

Son ideales para los principiantes en el mundo de la jardinería o para los propietarios que no tienen tiempo de cuidar su jardín. 

Árboles ornamentales

Son especies de porte arbóreo cuya aplicación principal es la de ornamentar un espacio. Destacan la mimosa o el cercis. A la hora de plantar un árbol, debes tener claro el crecimiento del mismo, pues si dispones de un jardín pequeño, puede no caber.

Plantas trepadoras

Son las que trepan por una superficie. Son perfectas para tapar muros, paredes, vallas o pérgolas.

Tapizantes

Una vez desarrolladas cubren la totalidad de un terreno. Si buscas originalidad y olvidarte del tradicional césped, las tapizantes son una buena forma de hacerlo.

También debes decidir si quieres que tu jardín se vea verde durante todo el año o si te gustaría verlo con tonalidad amarillas en el otoño. Teniendo en cuenta esto, puedes elegir especies de follaje perennifolio o variedades caducas.

Inspiración minimalista

Aunque dispongas de un jardín de reducido tamaño, no tienes por qué sacrificar belleza, al contrario, puedes inspirarte de muchas maneras.

Una gran opción para decorar un espacio de forma original es con un diseño minimalista. Para ello, utiliza piedras para cubrir el suelo, grava de río, placas de madera, etc.

Si buscas una zona que invite a la relajación y a la meditación, opta por el minimalismo.

Iluminación 

La iluminación que instales en el jardín será un éxito asegurado. Los elementos de luz artificial te van a permitir disfrutar de un espacio verde durante más tiempo.

Cada una de las bombillas o lámparas que instales, resaltarán las texturas de las plantas, y por consiguiente su belleza.

Materiales reciclados 

A la hora de decorar un jardín de pequeño tamaño puedes optar por emplear materiales reciclados. Así no sólo estarás llenado de color y belleza un espacio verde, también estarás cuidando el medio ambiente.

Usa por ejemplo palets de madera para realizar estructuras como jardineras, mesas, bancos e incluso jardines verticales.

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